LECHUGA Y RÚCULA HIDROPÓNICA EN LA BASE MARAMBIO

En la primera cosecha, el Módulo Antártico de Producción Hidropónica (MAPHI) instalado en la Base Antártica Conjunta Marambio logró producir 20 kilos de verduras, entre lechugas y rúculas.

La inédita experiencia que llevan adelante técnicos del Comando Conjunto Antártico (Cocoantar) y del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) seccional Santa Cruz, produjo 15,6 kg de lechuga y 4,4 kg de rúcula en fresco, “cantidad de verdura que alcanzó para abastecer a toda la dotación de la BAC Marambio, obteniendo incluso algunos sobrantes para almacenamiento”, indicó el INTA en la última publicación de su revista IDIA22.
La publicación del Instituto resalta que de los nueve países que actualmente realizan producción de cultivos en la Antártida, solo cuatro de ellos (Australia, Corea, Estados Unidos y Alemania) lo hacen en el interior de sus asentamientos antárticos.
“La Argentina se suma con el proyecto MAPHI a la lista de los pocos países que pueden garantizar una mejor calidad de vida a sus dotaciones a través de una mejora en la alimentación mediante la incorporación de verduras frescas, y de los beneficios psicológicos de tener un espacio de contacto con plantas”, remarca.
La iniciativa es posible gracias a la implementación de una técnica de producción en la que se cultiva sin suelo, en un medio líquido a través del cual se entregan los elementos nutritivos a las plantas; entre sus principales cualidades se destacan la eficiencia en el uso del agua, alta compatibilidad con el automatismo del proceso productivo y la optimización de uso de espacios pequeños, pudiéndose implementar la producción de los cultivos en lugares con suelos de mala calidad, baja disponibilidad de agua, o con condiciones climáticas adversas para la producción como las que presenta el ambiente antártico.