INFORME FISCAL: ANÁLISIS DE LOS INGRESOS, GASTOS Y RESULTADOS DEL SECTOR PÚBLICO
1- La recaudación asociada a la actividad económica creció en mayo un 12% contra igual mes de 2021.
En mayo, los ingresos totales alcanzaron los $1.128.630 millones lo que representa una retracción del 1,25% interanual respecto a 2021 en términos reales. Esta caída se vio impulsada por la caída real en la recaudación de derechos de exportación (dado que el tipo de cambio varió menos que la inflación) y porque en mayo de 2021 se había recaudado la mayor parte del Aporte de las Grandes Fortunas, lo que engrosa la base de comparación. El resto los conceptos crecen muy por encima de la inflación, destacándose los asociados a la actividad económica y al empleo. De hecho, si se quita del cálculo los ingresos extraordinarios del Aporte a las Grandes Fortunas de 2021, el crecimiento acumulado a mayo es del 11% real.
Asimismo, este mes también hubo un salto significativo de las “rentas por colocaciones de emisiones primarias”, explicado por la asignación de resultados positivos por colocar deuda CER por encima de los valores nominales. Estos ingresos totalizaron $37.051 millones. En ese sentido, vale mencionar que el Ministerio de Economía publicó una desagregación de este concepto dentro de las rentas de la propiedad y por otro ladose remarcó el tope a la utilización de este “recurso contable” equivalente a un 0,3% del PBI, diferenciando el Resultado Primario (que incluye las rentas por colocaciones) del Resultado Primario según Programa de Facilidades Extendidas (que excluye las rentas por emisión primaria que exceden límite establecido por el FMI).
Los tributos de mayor peso en los ingresos totales crecieron por encima de la inflación comparados con el mismo mes del año anterior. IVA (+8,9% real), Contribuciones a la SS (+9,5% real), Débitos y créditos (+17,4%) y Ganancias (+30,7% real).
En el Gráfico 1 se observa que durante el 2021 los ingresos y los gastos tuvieron un comportamiento dispar, con ingresos creciendo por encima de los gastos. Este año los ingresos y gastos se mueven a un ritmo similar.
A la hora de analizar los ingresos del Sector Público Nacional, vale la pena considerar que el 81% de dichos ingresos se explica por tributos. En el Gráfico 2 se observa que la Seguridad Social cumple un rol importante en los ingresos del sector público, siendo a los primeros 5 meses del 2022 el 29% de los mismos. Dentro de los impuestos, el IVA es el de mayor peso seguido por el Impuesto a las Ganancias, Impuestos a los Débitos y Créditos y los Derechos de Exportación. También se destaca en este año el crecimiento del peso de las Rentas a la propiedad que usualmente no representaba más que el 5%.
Analizando la evolución de la recaudación tributaria (Tabla 1) se registra que, en el acumulado anual, todos los impuestos asociados a la actividad económica y al trabajo crecieron en relación al mismo período de 2021, aunque se observa una caída respecto a las retenciones, bienes personales e impuestos internos. Comparando con 2019 se destacan el crecimiento de todos los conceptos salvo Seguridad social e IVA, esto muestra la fuerte recuperación económica pos pandemia, pero que aún se debe seguir creciendo.
En relación a los derechos de exportación, la comparación con los primeros 5 meses de 2021 muestra una baja del 12% (en mes pasado la baja había sido del 10%, es decir, se profundizó la caída). El motivo de esto es que la base de comparación con 2021 es muy alta debido a que los niveles de acopio de fines de 2020 fueron elevados y buena parte de esa liquidación se cursó en los primeros meses del año siguiente. Esto se combina con una variación del tipo de cambio nominal menor a la variación de la inflación, lo cual lleva a que tipo de cambio real sea menor que el del año pasado y esto afecte a la recaudación de Derechos de Exportación.
Como se puede ver en el Gráfico 4, la menor recaudación de Derechos de exportación en 2022 se da, incluso, en un contexto de récord de liquidación de divisas por parte del sector agropecuario.
2- Prestaciones sociales y obra pública son los motores del gasto, que volvió a crecer en términos reales
En mayo los gastos totales alcanzaron los $1.291.042 millones y vuelven a recuperarse en términos reales. La variación interanual de los gastos creció 17% respecto al mismo mes de 2021. El crecimiento del gasto fue potenciado por las prestaciones sociales, salarios y obra pública.
Analizando la composición del gasto corriente, las Jubilaciones representan el 38% seguido por los subsidios (16%) y gastos de funcionamiento (donde están incluidos los salarios del sector público), que representa 17%. Los cambios de los últimos años en la composición del gasto muestran una mayor erogación asociada a subsidios energéticos. Puntualmente este año, la suba fue muy significativa producto del aumento de los precios internacionales de la energía por la guerra entre Rusia y Ucrania.
En términos de evolución y como se observa en la Tabla 2, el nivel de gastos corrientes acumulado a mayo de 2022 se encuentra 14% respecto a 2021. Jubilaciones (+5% real), Asignaciones Familiares (+32%) y Otros Programas (+37%) son los conceptos de mayor aumento y de mayor peso en el gasto total.
Se destaca el crecimiento de las transferencias a personas por un total de $215.134 millones de las cuales casi la mitad fueron destinados al pago del refuerzo de ingresos a jubilados y a trabajadores monotributistas e informales, con el objetivo de morigerar los efectos de los aumentos de precios de los alimentos producto de la guerra entre Ucrania y Rusia.
A su vez, en el mes de mayo los subsidios económicos bajan un 0,4% en términos reales, marcando su primera baja en lo que va del año. A pesar de esto, en el acumulado 2022, los subsidios a la energía siguen por encima de la inflación un 48%.
Los gastos de capital, es decir la inversión pública en infraestructura, muestra un aumento del 13% comparado con los primeros 5 meses de 2021.
Se destacan las inversiones realizadas en Educación (+43% real por encima de 2021) por el plan Juana Manso. Luego se observa un crecimiento muy fuerte en Vivienda (+144%) por aumento en las transferencias a provincias para el Fondo Fiduciario para la Vivienda Social por +$13.602 millones y en Transporte (+17% real) dónde se destaca la inversión de +$1.387,6 millones realizadas por el Fondo Fiduciario Pro.Cre.Ar.
3- La suba del precio internacional de la energía por el conflicto bélico, deterioró el frente fiscal
En mayo el resultado primario fue deficitario en $162.412 millones y acumula un déficit de $431.331 millones, lo que representa un 0,5% del PBI[1] para los primeros 5 meses del año. El déficit financiero, por su parte, alcanzó los $242.443, un 133% más alto que en mayo de 2021 (aunque se esté pagando un 45% menos de intereses de deuda).
Teniendo en cuenta las metas que se deben cumplir con el FMI, y restando de los ingresos totales lo que sobra del tope establecido en el mes de abril del 0,3% del PBI, el déficit primario según el Programa de Facilidades Extendidas pasa a ser de $191.528 millones en el mes de mayo, en el acumulado de $463.447 millones y a representar el 0,6% del PBI. Si la meta anual de déficit es del 2,5% del PBI a casi la mitad del año se lleva alcanzada el 24% de la meta final.
Durante los primeros 5 meses del año, no hubo ningún mes superavitario por el fuerte efecto que la guerra provocó en las finanzas públicas. Por este motivo se debieron utilizar montos extraordinarios en subsidios a la energía y en asistencia social. Esto se combinó con ingresos que crecieron a un ritmo menor que el gasto.
De acuerdo a lo que se viene mencionando, tanto el déficit primario como el financiero están por encima de 2021 en términos monetarios reales. Esto ocurre porque en los primeros meses de ese año se produjo una recaudación extraordinaria de derechos de exportación (retenciones) y un gasto en subsidios energéticos con un cierto nivel y este año eso no sucedió, aunque se pueden subrayar niveles elevados de recaudación de derechos de exportación, los gastos en subsidios económicos se dispararon producto de la guerra entre Rusia y Ucrania. Esto lleva a que con un nivel de ingresos similar, el déficit se profundizó por mayores gastos.
4- Las nuevas pautas fiscales del FMI ofrecen margen para el cumplimiento de la meta de junio
Luego de la aprobación de la primera revisión el 8 de junio, en un comunicado oficial en conjunto el Staff del FMI expresó que “A pesar de los recientes aumentos en las tarifas de energía, la posición fiscal de Argentina también se está viendo afectada por el shock de los precios de las materias primas debido a un aumento en los subsidios energéticos y una adecuada expansión del apoyo social dirigido a los hogares de bajos ingresos” y agregaron que “Tomando en cuenta el impacto inicial de los shocks externos y los patrones estacionales de gasto e importación, se propone modificar las metas trimestrales interanuales del déficit fiscal primario y de acumulación de reservas, manteniendo sin cambios los objetivos anuales del programa”.
En el mensaje de aprobación del Directorio del FMI del pasado 25 de junio se plasmaron las nuevas metas. Las mismas se pueden ver en el gráfico 7. Esto supone una facilidad para que el gobierno alcance la segunda meta que, tal cual estaban diseñadas, lucía difícil alcanzar un déficit de $103.353 millones en junio, más considerando que los últimos 5 años, el déficit de junio (sacando el 2020 del cálculo porque fue un año extraordinario) se encontró en torno a los $230.000 millones de pesos de hoy. Con las nuevas metas, el déficit fiscal de dicho mes podría ser de hasta $410.953 millones de pesos, lo que deja al Gobierno en una situación mucho más cómoda que con la meta anterior.
La meta fiscal de ingresos se cumpliría cómodamente, ya que al mes de mayo se llevan recaudados $5.464.338 millones de pesos a precios de mayo lo cual representa un sobre cumplimiento de la meta del 15%.
Hacia adelante, la situación es compleja para el segundo semestre en términos de ingresos y gastos, dado que este período suele ser de importantes erogaciones para el gobierno y merma en los ingresos por la estacionalidad de la cosecha.
A esto se le debe agregar un panorama internacional que compromete el gasto en subsidios por el aumento de los precios de la energía, pero también porque la guerra implicó un salto en la inflación que deteriora fuertemente el poder adquisitivo de los sectores vulnerables, ante este escenario el gobierno lanzó el refuerzo de ingresos para estos sectores lo cual incrementó el gasto social. Desde CEPA se estimó que el refuerzo de ingresos tendría un costo fiscal aproximado de $200.000 millones a ser repartidos entre mayo y junio.
Retomando la cuestión de los subsidios, aunque ya se empiece a implementar la segmentación de tarifas, el impacto en el gasto del gobierno y en las familias es progresivo en etapas bimestrales desde junio y hasta fin de año. El esquema planteado establece que la población será dividida en 3 grupos de consumidores. El Grupo 1 sería aquel que está registrado con tarifa social y deberán afrontar un aumento del 21% que ya fue implementado en el mes de mayo. El grupo 2 es el que pagaría la tarifa plena y contempla un aumento de hasta el 42%, este grupo es el que incluye a la mayoría de las personas. Por último, el grupo 3 es el que dejaría de recibir subsidios y que se estima que representa el 10% de la población. Los integrantes de este grupo deben cumplir ciertos criterios de ingresos elevados y de propiedad. No se informó el ahorro fiscal esperado por la segmentación, habrá que seguir de cerca si alcanza para cumplir con las métase de déficit de este año.
Por el lado de los ingresos, en el segundo semestre se espera una merma en la recaudación del impuesto a las ganancias por la implementación del adelantamiento del ajuste por inflación del piso al impuesto a las ganancias anunciado el mes pasado. No se conoce con exactitud el costo fiscal de esta medida aunque algunas consultoras lo estiman alrededor de $10.000 millones de pesos.
Como contrapeso de estas erogaciones se planteó que se implementaría un Impuesto a la renta inesperada. Finalmente el proyecto fue presentado en el congreso, pero aún debe ingresar al debate en comisiones y probablemente no entre como un ingreso adicional en el ejercicio de 2022, sino en 2023. Ya que el mismo fue planteado como una sobretasa del impuesto a las ganancias de empresas con rentas imponibles por encima de los $1.000 millones de pesos, esto implica que recién podrían conocerse las ganancias de estas empresas en el cierre del ejercicio del impuesto a las ganancias que suele ocurrir en los primeros meses de año fiscal siguiente.
Por otro lado en el segundo semestre del año suele caer la recaudación de derechos de exportación por menor liquidación de divisas, esto ocurre todos los años por cuestiones de estacionalidad.
5- Conclusiones
- De acuerdo al informe fiscal que publica CEPA y a los datos publicados por el Ministerio de Economía del Sector Público Nacional base caja del mes de mayo: Los ingresos en mayo fueron de $1.128.630 millones (-1,25% real que el mismo mes del año anterior), los gastos de $1.291.042 millones (+17% real) y déficit primario de $162.412.
- Sacando del análisis los ingresos adicionales por Aporte de las Grandes Fortunas, los ingresos acumulados a mayo crecen un 11% real comparados con 2021.
- Los ingresos asociados a la actividad económica registraron aumentos reales respecto al mismo mes del año anterior:IVA (+8,9% real), Contribuciones a la SS (+9,5% real), Débitos y créditos (+17,4%) y Ganancias (+30,7% real).Los Aportes a la Seguridad Social y Ganancias suben por mejoras en los datos de empleo y por el impacto de las paritarias en los salarios registrados.
- Las Rentas de la Propiedad alcanzaron el tope en su uso y este mes se registró un excedente de $29.116 millones de acuerdo al tope máximo admitido por el FMI del 0,3% del PBI.
- El nivel de gastos corrientes acumulado a mayo de 2022 se encuentra 14% respecto a 2021: Jubilaciones (+5% real), Asignaciones Familiares (+32%) y Otros Programas (+37%) son los conceptos de mayor aumento y de mayor peso en el gasto total.
- El déficit primario en mayo 2022 fue de $162.412 millones y acumula un déficit de $431.331 millones, lo que representa un 0,5% del PBI para los primeros 5 meses del año.
- El déficit financiero alcanzó los $242.443, 133% más alto que en mayo de 2021 aunque se esté pagando 45% menos de intereses de deuda. Es decir, el aumento del déficit primario fue superior a la merma de pagos en intereses.
- Las nuevas pautas fiscales suponen un respiro para el cumplimiento de la meta de junio. Al finalizar mayo se habría ejecutado el 53% de la nueva meta, que representan $463.447 millones. Se debería obtener un déficit de $410.953 millones para junio, cuestión que luce cumplible considerando lo que ocurrió en dicho mes durante los últimos años.
Notas al pie
(1) Con un PBI estimado de 79.265.589 millones de pesos para todo el 2022. Calculado a partir del PBI de 2021, aplicando una tasa de crecimiento de 4% y una inflación de 63,5% promedio anual.
Fuente: Cepa.